El beso es quizá una de las muestras de afecto más universales. De hecho, existe en prácticamente todas las culturas. La duración del acto de besar varía desde tan solo un roce hasta varios segundos. En muchos países de Europa, la gente intercambia un beso en cada mejilla, mientras que en América es más común dar un solo beso. El beso en los labios, en cambio, se reserva normalmente para las relaciones más íntimas (y no hay duda de por qué).
En un beso íntimo de diez segundos se pueden transferir unos ochenta millones de bacterias. Aunque esto puede ayudar a algunas parejas de larga duración a diversificar sus bacterias bucales (incrementando su resistencia a otros microorganismos), el intercambio de saliva a menudo transfiere enfermedades.
Por desgracia, nadie está exento de los riesgos que entraña un beso. Aunque las parejas de larga duración tienen menos posibilidades, cualquiera puede contraer una enfermedad de este modo. HealhGrove ha empleado datos de la Organización Mundial de la Salud y del Centro para el Control de Enfermedades para mostrarnos nueve enfermedades que se transmiten a través de la saliva.
Veamos por qué quizá deberías tener más cuidado con a quién le das un beso.
1. Gripe
Los síntomas incluyen fiebre, tos, dolor de garganta, dolor corporal y fatiga. La mayoría de las personas se recuperan sin necesidad de tratamiento en menos de dos semanas. La gripe es una enfermedad muy estacional que se puede prevenir con una vacuna anual.
2. Rubéola
La rubéola o rubeola es una enfermedad contagiosa causada por un virus transmitido a través de la saliva o la mucosa de una persona infectada.
Los síntomas solo se manifiestan en la mitad de las personas que contraen la rubéola. Incluyen fiebre y sarpullidos y remiten en dos o tres días. La vacuna de la rubéola puede prevenir esta enfermedad.
3. Paperas
Las paperas son una infección viral que afecta a las glándulas salivales. Normalmente se propaga a través de la saliva de una persona infectada. Se previene fácilmente con una vacuna, gracias a lo cual esta enfermedad ya no es tan común como antiguamente. No obstante, todavía se producen brotes esporádicos entre las personas no vacunadas.
Los síntomas habituales son fiebre, dolo de cabeza, dolor muscular, fatiga y pérdida de apetito. Recuperarse de las paperas lleva unas dos semanas y el tratamiento, normalmente, se centra en aliviar los síntomas.
4. Polio
La polio es una enfermedad viral altamente infecciosa que afecta principalmente a los niños pequeños. El virus se propaga por el contacto oral o a través de comida o agua contaminadas. Una vez en el intestino, puede invadir el sistema nervioso y causar parálisis.
Los síntomas incluyen fiebre, fatiga, dolor de cabeza y rigidez en el cuello. Aunque no hay cura para la polio, ha sido erradicada en casi todo el mundo gracias a las vacunas administradas durante la infancia.
5. Meningitis
Hay muchos tipos de virus que pueden causar meningitis viral, que es grave, pero no tanto como la meningitis bacteriana. La enfermedad se propaga de una persona a otra a través de las secreciones respiratorias.
Los síntomas incluyen fiebre, dolor de cabeza y cuello, nauseas y vómitos. Aunque no hay tratamiento para la meningitis viral, las personas con un sistema inmune sano normalmente mejoran sin necesidad de ello.

